Por: Alejandro Pe?sclusa 2 de diciembre de 2008 Muchos no se explican por qu?luego de las elecciones del 23N, Hugo Ch?z se ha acelerado tanto, y de pronto propone, de manera abierta y sin tapujos, la reelecci?residencial. El proyecto de Ch?z no cuenta con una estructura que lo respalde por motivaciones ideol?as o morales. La mayor?de sus seguidores los mueven razones econ?as: los m?pobres las misiones; los boli burgueses y la dirigencia del PSUV los contratos; y los aliados internacionales los cuantiosos aportes que Ch?z le da, ya sea en forma de donaciones abiertas o ya sea en forma de maletines encubiertos. Ch?z est?onsciente de que el derrumbe del precio del petr? pone en peligro su proyecto. Sabe muy bien que a mediados de a?as reservas internacionales habr?disminuido sustancialmente y que el pa?estar?ncendido por los cuatro costados, no s?por la disidencia pol?ca, sino sobre todo por la crisis econ?a y social. Ch?z necesita prepararse desde ahora para ese momento, atornill?ose en el poder con la enmienda constitucional. Si bien es cierto que la enmienda le asegura su reelecci?ndefinida, tambi?le proporciona algo igualmente importante: una excusa para imponer, de una vez por todas, el Socialismo del Siglo XXI . Ch?z dir?ue el pueblo le ha dado un mandato para gobernar sin l?tes y sin condicionamientos. Interpretar?a enmienda como una patente de corso para destituir a alcaldes y gobernadores de oposici?para aprobar leyes totalitarias, para cerrar todos los medios de comunicaci?dversos, y para encarcelar a sus cr?cos. En resumen, la enmienda le prepara el camino para poder gobernar como un tirano, y para poner en pr?ica una represi?eroz, justo cuando la crisis econ?a arrecie. Por eso, la batalla para evitar la enmienda no es una escaramuza m? sino que define el resultado de la guerra. De esta batalla depende el futuro de la democracia y de la libertad, no s?de Venezuela, sino de Am?ca Latina, porque los clones de Ch?z, como Evo Morales, Rafael Correa, Daniel Ortega y Mauricio Funes, dependen directamente de su permanencia en el poder. Es de vital importancia que la oposici?o se plantee la enmienda como una elecci?? sino como un golpe de Estado; en primer lugar, porque ya fue rechazada por el voto popular; y en segundo lugar, porque busca acabar con los pocos espacios democr?cos que todav?quedan. Una situaci?an grave como la que est?lanteada, requiere de un esfuerzo muy superior al de una elecci?Por eso, no es suficiente el consenso de los partidos pol?cos. Hace falta la participaci? coordinaci?e todos los sectores democr?cos del pa?